Stella Maris, las únicas y verdaderas cabezas de cartel de Primavera Sound 2024

Al principio de la serie de Movistar Plus+ “La Mesías”, Enric (Roger Casamajor), un auxiliar de cámara que trabaja en un rodaje sobre la aparición de La Moreneta, queda trastocado por la visión de ese vídeo de girl group de pop cristiano que está haciendo ruido en las redes. No, no es exactamente por la canción ni por las imágenes que lo acompañan; es algo más personal. Pero podría ser exactamente por ambas cosas: “Stella Maris”, su tema de autopresentación, es un delirio imborrable, sobre todo si se disfruta acompañado por las estampas psicotrópicas de ese videoclip de falso amateurismo.

Seguramente la mejor serie nacional del año (o una de las mejores, a secas, independientemente de su nacionalidad), “La Mesías” ha sido un disfrute por muchos y muy variados motivos: su expansivo cruce de géneros y tonos, su enjundia cinematográfica o una catarsis final que resultó, según el momento, divertida o dolorosa. Pero, en el fondo, todos los espectadores entraban a cada episodio esperando una única cosa, es decir, algún nuevo vídeo, alguna nueva canción o aparición de Stella Maris, el reclusivo grupo imaginario en el centro del relato. Esos momentos eran disfrutables puntos de descompresión en un (no solo) drama cargado de claustrofobia, trauma, neurosis y engaño.

Por si algún lector ha vivido debajo de una roca en los últimos meses, recordaremos que esta banda imposible nació en el encierro más absoluto. Es el sueño loco de la madre del título (Ana Rujas, Lola Dueñas y Carmen Machi, según el momento vital), cuyos delirios mesiánicos incluyen convertirse en una especie de Joseph Jackson del Maresme y fundar con sus hijas un grupo pop a mayor gloria de Cristo. Las chicas son cinco, una de ellas con carrera pop real fuera de la pantalla: Amaia, que encarna a Cecilia, la que mejor canta. Lo demuestra sobre todo con “El árbol”, tema compuesto por ella misma al salir de “OT” y que ha encontrado su espacio natural en la serie; en uno de sus momentos más delicados e íntimos, para ser precisos.

Al lado de Amaia brillan perversamente Cristina Rueda como Aina, la directora y productora del grupo (“me encanta la música electrónica, distorsionar y crujir samples estilo brostep”, se puede leer en el Instagram oficial); Mabel Olea (bailarina de Rigoberta Bandini) como Julia, la autora de unas coreografías dedicadas siempre a Dios padre; Valeria Collado como Neus, editora de los imposibles vídeos; Ania Guijarro como Beth, que se encarga de los vestidos, y Sara Roch como la benjamina, Nora, encargada de los imprescindibles efectos digitales.

Detrás del repertorio de Stella Maris encontramos a Hidrogenesse, el dúo de (art)pop formado por Genís Segarra y Carlos Ballesteros, que tuvieron libertad total para hacer con estas canciones lo que quisieran, y se nota. Según explicaron en entrevista con “Shangay”, seguramente les eligieron porque son un poco como este girl group: “Prácticamente lo hacemos todo sin injerencia externa. Resumiendo: que nosotros también subimos nuestras propias canciones a YouTube cuando las terminamos. Y nos diseñamos las portadas, y nos elegimos los vestuarios, y no tenemos ni managers ni booking”. Escribieron canciones absurdas mientras compartían ideas con Los Javis –creadores de la serie– a través de WhatsApp, pero el repertorio solo empezó a coger su verdadera e icónica forma cuando se reunieron con las actrices en el estudio y decidieron con ellas quién cantaría cada parte.

Lo que quedaron fueron solo, solo, solo hits: además de la citada “Stella Maris” (“nunca te perderás siguiendo a esta estrella/ es un GPS gratis”), están ese número de synthpop delirante llamado “La alcantarilla”, la indeciblemente bella (sin ironías, es medio ambient) “¿Dónde estás?”, la demencia hip-house “Por ti existo” o la canción tradicional infantil imaginaria “La puerta del cielo (Toc toc)”, que en la serie se erige en extrañísimo y fascinante himno rave, a juego con el descalabro intoxicado de Irene (Macarena García). Canciones recogidas en un EP de nueve pistas, “La casa huele a Gloria”, que es un poco de broma y, a la vez, seriamente bueno, como muchos de los discos que publican Hidrogenesse a través del sello Austrohúngaro. ¿Están ya en negociaciones con Stella Maris para convertirlas en próximo fichaje?

Del próximo Primavera Sound se han anunciado centenar y medio de nombres, entre ellos (o, sobre todo, ellas) Lana Del Rey, SZA, Bikini Kill, Mitski o PJ Harvey, pero la presencia que tiene a todo el mundo entusiasmado es la de Stella Maris, más que acertado ejercicio de “stunt casting” por parte del festival. Hay ansiedad por ver a las chicas en acción y por tratar de seguirlas en sus coreografías. Hidrogenesse, según han comentado, se enteraron de la actuación por la prensa, pero ojalá finalmente acompañen a las artistas sobre el escenario, aunque sea en discreto (algo quizá imposible para ellos) segundo plano: sería el remate ideal.

Foto: Movistar Plus+